 |
Origen:
La historia del galgo inglés, Greyhound, se atribuye a Gran Bretaña, ya que fue quien se interesó en el desarrollo de su estándar, muchos criadores se afanaron con esta raza, tanto para utilizar al galgo inglés como utilidad para la caza, concretamente para atrapar liebres vivas, como un perro apto para carreras.
Surgieron muchas instalaciones en las que se realizaban auténticas competiciones, galardonando al can que consiguiese victoriosamente ser el más rápido de entre todos los concursantes. En la actualidad este tipo de competiciones siguen existiendo, aunque, al igual que ocurre con otras razas de galgos, son cuestionadas, por el hecho de que los animales que no presten buen servicio para la competición son descartados para tal fin, incluso se han reportado casos de maltrato animal. Un galgo inglés puede alcanzar más de 70 km por hora y sus saltos tampoco son nada despreciables, de hecho muchos han superado los 7 m de altura.
Surgieron muchas instalaciones en las que se realizaban auténticas competiciones, galardonando al can que consiguiese victoriosamente ser el más rápido de entre todos los concursantes. En la actualidad este tipo de competiciones siguen existiendo, aunque, al igual que ocurre con otras razas de galgos, son cuestionadas, por el hecho de que los animales que no presten buen servicio para la competición son descartados para tal fin, incluso se han reportado casos de maltrato animal. Un galgo inglés puede alcanzar más de 70 km por hora y sus saltos tampoco son nada despreciables, de hecho muchos han superado los 7 m de altura.
Historia:
La historia del galgo inglés, Greyhound, se atribuye a Gran Bretaña, ya que fue quien se interesó en el desarrollo de su estándar, muchos criadores se afanaron con esta raza, tanto para utilizar al galgo inglés como utilidad para la caza, concretamente para atrapar liebres vivas, como un perro apto para carreras.
Surgieron muchas instalaciones en las que se realizaban auténticas competiciones, galardonando al can que consiguiese victoriosamente ser el más rápido de entre todos los concursantes. En la actualidad este tipo de competiciones siguen existiendo, aunque, al igual que ocurre con otras razas de galgos, son cuestionadas, por el hecho de que los animales que no presten buen servicio para la competición son descartados para tal fin, incluso se han reportado casos de maltrato animal. Un galgo inglés puede alcanzar más de 70 km por hora y sus saltos tampoco son nada despreciables, de hecho muchos han superado los 7 m de altura.
Aunque su historia se atribuyen a Gran Bretaña, lo cierto es que desde épocas lejanas se tiene constancia de perros que presentaban este tipo del morfología, como es el caso de tumbas en el Antiguo Egipto. En Europa también se han encontrado hallazgos. Otras teorías atribuyen sus orígenes en el Oriente Medio.
Fue un perro muy querido por la nobleza y aristocracia, de hecho hubo un tiempo en que los ciudadanos no podían disponer de un galgo inglés con fines de caza u otro deporte, dado que estas actividades estaban reservadas exclusivamente para las más altas instancias.
Surgieron muchas instalaciones en las que se realizaban auténticas competiciones, galardonando al can que consiguiese victoriosamente ser el más rápido de entre todos los concursantes. En la actualidad este tipo de competiciones siguen existiendo, aunque, al igual que ocurre con otras razas de galgos, son cuestionadas, por el hecho de que los animales que no presten buen servicio para la competición son descartados para tal fin, incluso se han reportado casos de maltrato animal. Un galgo inglés puede alcanzar más de 70 km por hora y sus saltos tampoco son nada despreciables, de hecho muchos han superado los 7 m de altura.
Aunque su historia se atribuyen a Gran Bretaña, lo cierto es que desde épocas lejanas se tiene constancia de perros que presentaban este tipo del morfología, como es el caso de tumbas en el Antiguo Egipto. En Europa también se han encontrado hallazgos. Otras teorías atribuyen sus orígenes en el Oriente Medio.
Fue un perro muy querido por la nobleza y aristocracia, de hecho hubo un tiempo en que los ciudadanos no podían disponer de un galgo inglés con fines de caza u otro deporte, dado que estas actividades estaban reservadas exclusivamente para las más altas instancias.
Características:
- Altura: los machos tienen una altura que varía entre los 71 y los 76 cm, mientras que las hembras miden entre los 68 y 71 cm.
- Peso: los Greyhound machos suelen pesar entre 29 y 32 kilogramos, y las hembras entre los 27 y 29 kilogramos.
- Pelaje: corto y firme.
- Color de pelaje: negro, blanco, rojo, azul, leonado, arena, atigrado o cualquiera de esos colores manchados con blanco.
- Cuerpo: de porte elegante y estilizado.
- Cabeza: larga y estrecha.
- Ojos: ovalados y oscuros.
- Hocico: se adelgaza hacia la punta.
- Cola: insertada baja, larga, fina y ligeramente curvada.
- Orejas: pequeñas.
- Esperanza de vida: viven entre 10 y 12 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario